La calidad de vida se relaciona con el estado de bienestar de las personas y de sus potencialidades en el transcurso de la vida y cómo puede modificarse y cambiar como resultado de múltiples factores que nos afectan. Comprende la interacción de varios factores tanto subjetivos como objetivos; en los subjetivos está la percepción de cada persona acerca de su bienestar a nivel físico, psicológico y social. Los factores objetivos se relacionan con el bienestar material, la salud y la armonía entre el ambiente físico y la comunidad.
La epilepsia se considera una enfermedad crónica, es uno de los eventos en salud que impacta de manera importante la calidad de vida de las personas y esto se convierte en un factor primordial en el momento de tomar la decisión de su tratamiento.
La epilepsia afecta la calidad de vida tanto por la frecuencia de crisis, como por los factores relacionados a la atención de los tratamientos y su adherencia; a sus efectos adversos y complicaciones.
Los principios para el manejo integral del tratamiento orientado a mejorar la calidad de vida están dirigidos a:
- Orientar el control de las crisis
- Promover el estado de bienestar físico y mental
- Realizar rehabilitación social
- Integrar el equipo multidisciplinario que asume el tratamiento y acompañamiento.